EL ORDENADOR MALDITO

Katia estaba asustada, no sabía qué pensar, llevaba varios días preocupada con su ordenador. Aquella tarde había llegado al colmo de la desesperación. Era asesora fiscal y todavía tenía que presentar las declaraciones fiscales. Para su desgracia, el tiempo corría en su contra. Llevaba varios días intentándolo, pero al final daba siempre error imposibilitando la presentación. No sabía si aquello era a causa de una deficiente configuración de su pc o más bien un problema de la sede tributaria.  La impresora tampoco parecía colaborar, se le había atascado el papel y se había estropeado… 

Nerviosa, decidió dejarlo y salir a dar una vuelta, para ver si se tranquilizaba y aplacar los sentimientos de ira y frustración que la invadían. 

Era ya noche cerrada cuando regresó y decidió continuar con la tarea… Estaba esperando que el ordenador arrancara, cuando se fijó en el extraño movimiento que hizo uno de los portarretratos del mueble, había girado un poco, un movimiento casi imperceptible, pero que sus ojos captaron...

Katia empezó a sentir miedo, se le reflejaba en la cara… 

El ordenador ya se había iniciado, pero inexplicablemente, la foto de fondo que animaba su escritorio había cambiado, ahora aparecía un lugar siniestro, un caserón en ruinas, sobre el que se cernía un negro nubarrón…Katia interpretó aquello como una situación metafórica que definía perfectamente su estado de ánimo

 La chica sintió deseos de llorar, aquello era cosa del demonio, algún tipo de programa malicioso, un virus, se había apoderado de su PC y estaba haciendo de las suyas…. 

Rehusó seguir con las declaraciones, así que intentó entretenerse con Facebook, pero era imposible, en todos sus intentos, acababa apareciendo la irritante pantalla en blanco…

Ante el éxito, lo intentó con Google y el acceso era perfecto, no había problema alguno… Ojeó las publicaciones y todas eran muy relajantes… Pero duró poco, no tardó mucho en aparecer el  caos, comenzaron a abrirse y cerrarse ventanas sin que ella hiciera nada, se le cortaba la conexión sin más y como colofón final, el ordenador se apagó y se encendió solo… Aterrada lo desconectó. Y, se puso la televisión y la famosa serie del momento consiguió evadirla del problema. Pero cuando ya el sueño la dominaba y sintió la imperiosa llamada de Morfeo, se dispuso a apagar el televisor, pero parecía tener vida propia, pues al darse la vuelta volvió a escuchar el familiar sonido que emitía la "caja tonta", se giró temerosa y cuando la vio encendida algo se apagó en su cerebro, se sintió como atrapada en la irrealidad más vertiginosa, sintió como todo daba vueltas a su alrededor… Al final, se dejó caer exhausta, casi sin fuerzas en el sofá, y se quedó mirando fijamente la animada pantalla del televisor, y pensó que era víctima de una macabra broma del destino… 

En ese momento, el ordenador se reinició solo y volvió a aparecer el escritorio con su foto de siempre, un hermoso paisaje de Normandía, el mismo que la cautivó cuando lo vio por primera vez... Pero, al tenerlo nuevamente ante sus ojos, provocaba un montón de sentimientos encontrados en ella. 

Katia sabía perfectamente, que lo que le estaba ocurriendo no era normal, aquello no era cosa de un hacker, y le pasó por la mente la idea de que su ordenador estaba poseído por alguna entidad demoníaca que lo único que pretendía era jugar con sus sentimientos, desesperarla y llenarla de ira… 

Así que decidió hacerle un exorcismo a la computadora, esperando erradicar a la bestia que se había apoderado de su disco duro. A falta de agua bendita, tan común en estos casos, se dirigió a la caja de las herramientas y agarró el martillo más grande y con él en la mano se dirigió hacia la computadora que reposaba sobre una pequeña mesa, bajo una aparente normalidad… 

Katia la emprendió a golpes con el portátil, poseída por una energía febril, y lo dejó completamente destrozado… Cuando hubo acabado, lo agarró y lo arrojó por la ventana… Los restos del ordenador se estrellaron en el suelo. 

La luz de todo el edificio se apagó y los vecinos se asomaron a la calle para ver qué pasaba, entonces vieron a la vecina que completamente enloquecida no dejaba de lanzar al vacío todo tipo de aparatos electrodomésticos, llegando a accidentar a más de un transeúnte… Para detener tal escándalo y frenar a la homicida, llamaron a la policía. La estridente sirena anunció su llegada inminente. Pero, cuando escucharon la voz atronadora que surgia del edificio frenaron en seco. Katia al escucharla, salió corriendo de su casa, llorando y gritando… Parecía haber enloquecido.. Vinieron más unidades de policía y acordonaron la calle, pero para Katia ya era tarde, en su desesperación por huir de aquel horror demoníaco, al cruzar la calle fue atropellada por un automóvil y el golpe fue tan fuerte, que no volvió a levantarse… Minutos más tarde era llevada camino del hospital… Estaba con vida y todavía podía salvarse, todavía existía una esperanza para la desdichada muchacha… Estaba monitorizada y habían conseguido estabilizarla, pero el enfermero de la ambulancia creyó detectar una actividad inusual en las constantes de la chica que aparecían en la pantalla del monitor, y se sorprendió cuando aquello al final quedó completamente en negro… Extrañado le dio unos cuantos golpecitos para ver si el aparato respondía, pero seguía fuera de servicio, como sin vida… Miró a la chica, que dentro de la gravedad se mantenía estable y no se preocupó, total sólo serían unos minutos hasta el hospital y luego ya estaría mejor atendida... 

 Mientras tanto, en la calle donde había tenido lugar el suceso, los atónitos vecinos salieron a la calle para ayudar o chafardear… Sin embargo, nadie vio como la ambulancia volcaba y se incendiaba unos metros más adelante,… Tampoco vieron, como Katia se apeaba del vehículo en llamas, intacta, pero con un fulgor demoníaco en la mirada...

Era el comienzo de una historia cibernética de posesión demoníaca...