FANTASMA CIBERNÉTICO, II




"Lenín", o Carolina, estaba preocupada por el cariz que había tomado el asunto del Fantasma cibernético, lo que había empezado siendo algo así como un inocente juego que habían inventado ella y Hugo, el "fantasma ignorado", se había complicado notablemente y su amigo no daba señales de vida, por lo que se estaba planteando presentarse en su casa.

El ambicioso proyecto que, en principio, iba encaminado a captar la reacción de la gente ante los comentarios de un supuesto fantasma, había sido tan previsible como esperaban, demostrando su teoría sobre las relaciones humanas alienantes y desmotivadoras. Es decir, la gente se muestra menos tolerante con  las ideas religiosas que con las actitudes vejatorias y despreciativas.

Aquella tarde era especialmente fría y el viento soplaba con fuerza casi huracanada. Así que, apetecía muy poco salir de casa y, muchos, en lugar de enfrentarse a las inclemencias del tiempo, preferían matar el aburrimiento navegando por internet y dando opiniones en algunos de los foros que solían frecuentar.

Tras el encontronazo sufrido con otros dos usuarios en un foro, optó por entrar y revisar todas sus redes sociales y es que "Lenín-Carolina", no tenía bastante con participar en una sola, un afán de curiosidad la había llevado a registrarse en varias a la vez. Empezó por el facebook, observó que el número de las notificaciones había aumentado notoriamente, todas pertenecientes a un usuario desconocido, así que las eliminó todas. Es lo que solía hacer cuando le llegaba una solicitud de alguien que no conocía, siempre era muy cautelosa con sus cosas.

                                                                            ***

-"Esto es demasiado, tengo más de 40 solicitudes para "Hotel 666", de una tal "Lady of Fire"- Comentaba a sus amigos un muchacho moreno, sus grandes ojos negros se ocultaban tras unas lentes de un conocido óptico muy televisivo.

Se encontraban en otro punto de la ciudad, resguardándose en aquella inhóspita tarde dentro de una cafetería, Ernesto o, mejor dicho, "el samaritano" se tomaba un café bien caliente en compañía de unos amigos. Todos estaban conectados al Facebook, cuando vio el gran número de notificaciones lo compartió con sus amigos.
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-"Ten cuidado porque ese juego ya no existe, fue uno de los juegos de rol más seguido en la red y desapareció de la noche a la mañana. Según parece, pasó algo entre sus seguidores y se eliminó. La primera vez que lo visité, al final mi ordenador se quedó colgado y no pude entrar, así que por cautela decidí no volver a visitar esa página. - Comentó Pedro, aproximándose y echándole un ojo a las notificaciones- Yo de ti, las eliminaría, sin más"-

-" Sí, no te fíes, - Le aconsejó Luis, mientras buscaba en su IPhone información sobre el extraño juego- Estoy buscando la web del juego y mira lo que me ha salido"- El chico, casi albino, y unos ojos grises que recordaban al humo, acercó su móvil a Ernesto.-

En la pantalla del aparato aparecía una imagen con el anagrama del hotel y un mensaje en el que se decía que el hotel ya no estaba a disposición de los clientes. Después de dar las gracias formalmente por hacer uso de sus servicios, emplazaba a los usuarios para el año siguiente.

-" Pues si ya no existe, no deja de ser raro que me hayan llegado las notificaciones... A lo mejor es una edición especial. Estoy intrigado, y, ¿si acepto la solicitud y vemos qué pasa, si es alguna cosa rara pues la eliminamos y ya está?"-

-"Mira, no te metas en camisa de once varas, que era un juego muy raro, escalofriante, diría yo, y daba mucho miedo, aconsejaban que mejor no entrases si eras menor de edad, sufrías dolencias cardíacas o eras muy sugestionable. Era una pasada, resulta que sólo funcionaba entre las 8 h de la tarde y las 6 de la mañana y era imprescindible usar micrófono, webcam y recomendaban tener auriculares."- Pedro informaba a su amigo con detenimiento sobre las características del juego para que supiera a qué se enfrentaba si decidía visitarlo o participar -"Por cierto yo conseguí entrar y no pasé de la primera fase, casi me cagué de miedo, y encima me hicieron una foto con cara de espanto, que no tuve la oportunidad de ver"-

-" ¡¡¡Participaste en el juego!!! a eso le llamo yo tener un buen par..."- Dijo Ernesto mientras miraba la extraña imagen que aparecía en la pantalla y el mensaje cuyas letras anunciaban el cese de la actividad y pensó que le estaban gastando una broma o en el peor de los casos, aquello también podía ser la obra de alguno de esos desaprensivos que se dedican a hacer de las suyas en internet ... Pero la curiosidad mató al gato y "el samaritano" no era precisamente la excepción que confirma la regla, la morbosidad más insana se había apoderado de su mente y tenía más ganas que nunca de probar aquel juego... Así que en lugar de aceptar las solicitudes, porque desconfiaba, decidió hacer click, directamente, en la Url y, directamente, le llevó hasta el juego.. Extrañamente, ahora parecía que estaba disponible, ¿por qué con su amigo no y con él sí? Otro misterio del que tenía que haber desconfiado .Sus amigos le contemplaban con miradas recelosas y el corazón en un puño, para relajar la situación el muchacho de las gafas comentó:

-" Bueno, tengo entendido que una vez has entrado se suceden los sustos uno detrás de otro y hay veces en las que tienes que cantar para sobrevivir y superar las pruebas. Los usuarios tienen que superar retos espeluznantes en 13 habitaciones diferentes sin quieren escapar, pero antes hay que pasar por una cripta, una habitación oscura y otros lugares claustrofóbicos, donde ocurren cosas horripilantes ... ¡¡¡Era demasiado!!!, divertido y muy original. Tenía muchos seguidores y no comprendo cómo han podido retirarlo"-

-" Estimo que sería más oportuno jugar en casa, hay que recrear el ambiente, conseguir una atmósfera adecuada para interactuar con el juego y aquí estamos muy limitados."- Opinó "El samaritano".

Los amigos le dieron la razón y tras pagar las consumiciones, abandonaron el bar... Su piso se encontraba en un pequeño edificio de apenas 4 plantas, en mitad de una amplia zona no edificada; sin duda, perteneciente a una gran propiedad privada que debió de ser construida allá por la década de los 70. Aparcó su pequeño utilitario en la amplia explanada de tierra que había delante de su edificio y con paso presuroso se dirigieron hacia la casa.

El edificio era prácticamente una ruina y pedía a gritos una considerable obra de mantenimiento.Seguramente, la crisis tenía mucho que ver con la sangrante desidia que lo envolvía. El ascensor se había declarado en rebeldía, porque a pesar de las repetidas veces que lo llamaron, no acudió, se hacía el sordo. Por eso, se vieron obligados a subir por la destartalada y decrépita escalera. Las manchas de humedad y los desconchados de la pared provocaban miradas de desagrado en los jóvenes y la falta de iluminación en algunas plantas, estuvo a punto de provocar algún accidente.

Cuando penetraron en el piso, bastante grande para un soltero sin pareja, se aposentaron en los sillones y se pusieron cómodos, mientras el amigo les servía un refresco. Para crear ambiente, y como si se tratase de un ritual, fue apagando todas las luces de la casa, bajó las persianas, subió el volumen al máximo, conectó el micrófono y los auriculares y cogiendo el sillón reclinable para estar bien cómodo, se sentó delante de la pantalla de su ordenador.

Sus amigos contemplaron como si estuvieran en trance todo lo que iba haciendo y cuando, por fin, reaccionaron, se levantaron de sus asientos y tomaron posiciones junto a su amigo "el samaritano" frente al ordenador para ver qué les deparaba la locura que acababa de cometer su amigo.

Así que, perdida la desconfianza en el género humano, decidió aceptar las solicitudes. En realidad, sólo con una bastaba. En ese momento, le vino a la memoria la desagradable experiencia que vivió en el foro, ya casi olvidada. Respiró con alivio y orgullo al verse rodeado de sus amigos que, además, se preocupaban por él. Sonrió al pensar que a él no le pasaba lo mismo que al pobre "fantasma ignorado", él tenía muchos amigos con los que podía contar, jamás le ignoraban y siempre le dejaban comentarios en sus publicaciones. Pese al enfrentamiento que tuvo con "Alibaba" y Lenín, el mensaje que dejó "el fantasma ignorado" le produjo una cierta sensación de desasosiego. Ese vacío y malestar que nace en nosotros cuando intuimos que estamos en presencia de una maldad que nace de lo más profundo del individuo y que tiene que ver con la capacidad de sufrimiento. Era incapaz de comprender como alguien podía ser capaz de expresar sus sentimientos de una manera tan sangrante en un sitio público como podía ser un Foro.

Trató de alejar de su mente al desdichado ente paranormal procedió a aceptar las solicitudes, pertenecían a "Lady of Fire" y comenzar con el juego...

La interfaz del juego era muy llamativa, los gráficos eran muy buenos y aparecían en 3D, la música clásica de fondo no congeniaba demasiado con la imagen gore del hotel, pero el efecto logrado resultaba un tanto truculento y efectista, por lo menos ponía los pelos de punta.

La imagen terrorífica del Hotel 666 dio paso a una imagen en blanco con un anagrama gótico, con el nombre del Hotel. Para acceder al juego te solicitaban un nick de usuario, correo electrónico y la creación de una contraseña...

Los amigos, en un momento de lucidez y raciocinio, intentaron evitar que siguiera adelante, pero él hizo caso omiso y siguió empeñado en esclarecer aquel misterio. La imagen cambió y se produjo un fundido en negro con la aparición fugaz de la típica frase:

<< BIENVENIDOS AL HOTEL 666, DONDE LES ESPERAN SUS AMIGOS>>>

                                                                           ***

Mientras Carolina-Lenín estaba entretenida en eliminar todas las notificaciones que procedían de aquella persona desconocida que decía llamarse "Lady of Fire", entró un mensaje de una persona que decía llamarse Melinda, en él aparecía el link de una página muy famosa, pertenecía a un juego que se llamaba "EL HOTEL 666", tras pensárselo durante un tiempo, hizo click y la URL la llevó hasta la aplicación. Carolina detectó que algo no funcionaba pues el botón del inicio ya estaba activado y, contrariada, vio como la aplicación se descargaba y activaba sin que pudiera analizarla con su programa de seguridad, como tenía por costumbre cada vez que se descargaba algo de la red.

Consternada y muy asustada vio como todo se desarrollaba demasiado rápidamente, acostumbrada a la cansina lentitud de su PC. Así que en lugar de actuar con cautela y eliminarla sin más, optó por abrirla para ver qué secretos ocultaba aquello que le había llegado por correo.

La pantalla se puso en negro, con la típica flechita en el centro de la pantalla, que a más de uno desquicia cuando se prolonga demasiado. Pendiente de cómo evolucionaba la descarga en la pantalla, casi se desespera, porque aquello amenazaba con hacerse eterno. Hasta que de pronto, las primeras palabras aparecieron en el monitor, resplandecientes y como si emitiesen luz propia, decían:

      << BIENVENIDA AL HOTEL 666, DONDE LA ESPERAN SUS AMIGOS>>

Carolina se acobardó, y antes de que el juego se desarrollara, pues sabía que aquello no era normal, lo apagó bruscamente desconectándolo de la red. Un momento de lucidez se presenta muy pocas veces en las personas y la chica hizo caso a esa vocecita interior, esa que muchas veces la reprendía por hacer algo que no era demasiado acertado. Estaba nerviosa, era la primera vez que se encontraba con una aplicación tan agresiva y como no era habitual en ella dejarse atrapar por ese tipo de juegos, decidió que esta vez no iba a ser distinta.

La joven decidió llamar a su amigo Hugo para ver si lo podía localizar, pero seguía sin responder, cuando saltó el contestador automático dejó el escueto mensaje. Pero se lo pensó mejor y decidió ir a su casa para ver qué pasaba.. Y, si tenía suerte, intentar dar con algún vecino que supiera algo sobre la extraña desaparición del joven....

                                                                         ***

La portada de inicio era tan aterradora que Ernesto estuvo a punto de abandonar nada más empezar ya que tuvo un truculento despertar en una cripta dentro de un ataúd. Cuando se incorporó, vio que delante tenía un espejo, deslucido y ajado por el tiempo. Se contempló y lo que vio le espantó, aquella persona que se reflejaba en el espejo tenía muy poco que ver con lo que él era. La recreación del avatar era tan realista que sólo con verse reflejado en el espejo ya se espantó, unas profundas ojeras, propias de un cadáver, enmarcaban su rostro y las cejas aparecían demasiado negras y abundantes. Sonrió y pensó que debían de haberles crecido de golpe por el susto, le llamó la atención la excesiva palidez de su rostro y el tono rojo subido de sus labios entre los que se asomaban unos largos colmillos para atacar y desangrar víctimas (casi siempre femeninas) ... Alzó la ceja y estuvo a punto de reírse cuando comprendió que aquel hotel tan terrorífico y estrambótico le había convertido en .... ¡¡¡UN VAMPIRO!!!.

A un lado del ataud descansaba la capa negra con el forro de color púrpura. Enseguida, una voz le ordenó:

<< Tienes que realizar la primera prueba: presta atención.

Como puedes ver te has convertido en un temible vampiro, el amo de la noche... Tienes que abandonar la cripta y salir al pasillo, una vez fuera, te encontrarás en el pasillo... Sigue hasta el final... Cuando veas una puerta distinta a las demás con un picaporte en forma de garra, soló tienes que agarrarlo y atraerlo hacia ti. Cuando se abra encontrarás en el interior a la "doncella" de los dolores, ten cuidado con ella porque es un poco peculiar, tu prueba será vampirizarla.... Créeme, no será fácil...

Ernesto fue dirigiendo a su avatar siguiendo las órdenes de la voz. Moviendo el ratón con habilidad, el pasillo era horripilante, una copia más tétrica del hotel de la película "el resplandor" unos apliques en la pared iluminaban tenuemente la estancia, dibujando extrañas formas ondulantes en las paredes. Cuando se encontró ante la puerta accionó el resorte que se ocultaba tras el picaporte y penetró en la habitación de la "doncella de los dolores",

La supuesta "doncella" era Linda Blair en la mejor representación de su carrera..

-" Pues sí que va a ser difícil hincar el diente en el cuello a esta moza"- Pensó "el samaritano", mientras contemplaba como la cabeza de la poseída daba más vueltas que una rueda de molino...

-"Hola Preciosa.."- Dijo su avatar en la pantalla con un poco de sorna.

-" ¿ HOLA PRECIOSAAAAAAA...? "- Imitó la posesa burlándose.

-"Hola preciosa... - repitió la endemoniada- ¡¡¡HOLA PRECIOSOOOOOOOOOO!!!...Venga que estoy impaciente por recibir ese mordisquito tuyo"- Respondió y su voz que intentaba ser sensual sonó gutural, cavernosa y su rostro de pesadilla se desfiguró con una mueca grotesca...

Ernesto movió con el ratón a su avatar y lo acercó hasta la niña del exorcista girovaga, y como si hiciera malabarismos con la capa intentó cogerla desprevenirla, pero al sentirse apretada entre los brazos del vampiro virtual se debatió con rudeza, le pateó las espinillas y sobre la lustrosa capa del vampiro y derramó un vómito verde y asqueroso. El vampiro se le abalanzó, intentando clavarle los colmillos en el cuello retorcido. Cuando por fin, hundió sus dientes en la parte inferior del cuello de la posesa, arrancando su yugular, dejándola caer en el piso. Moribunda, se inclinó hacia él, mientras jadeaba y se ahogaba en su propia sangre, le susurró al oído:

-" Sabes una cosa: ... SOY DIOSSSSSSSSSS"-

Una vez conseguida la prueba, el rostro de pesadilla de la niña del exorcista, apareció súbitamente llenando la pantalla, dando un susto a los jóvenes que no podían apartar los ojos del monitor,. en aquel momento, se disparó la web y les hizo una foto inmortalizando su cara de espanto para la posteridad....

Los jóvenes estallaron en carcajadas, una explosión de la tensión terrorífica que acababan de pasar...

-" ¡¡¡Qué pasada!!!, ...es buenísimo"- Dijo el muchacho de los ojos que recordaban el humo, mientras dirigía su mirada hacia el huésped virtual del hotel y exclamó con una rara expresión en el rostro.

-" Tío, tienes sangre en la boca"-

-"¿Cómo que tengo sangre?"- Comentaba más para sí que para los amigos, cuando abandonó el asiento y se dirigió al lavabo para ver qué es lo que pasaba.

Efectivamente la imagen reflejada en el espejo le devolvía un rostro pálido, con muchas ojeras y un reguero de sangre que recorría la comisura de sus labios.

Intentó buscar alguna herida que fuese el origen de la hemorragia, pero tras realizar un enjuague pudo comprobar que sus encías estaban en perfecto estado y no se apreciaba ningún absceso bucal que pudiese ocasionar aquel flujo sanguíneo. Horrorizado comprendió que aquella sangre no le pertenecía...

Abandonó el baño como si mil demonios le persiguiesen y con decisión desconectó el juego, y todo volvió a la normalidad... Tras el suceso inexplicable los amigos se fueron con cajas destempladas, y el se quedó pensando en la terrorífica experiencia que acababa de vivir.

Repentinamente, el ordenador volvió a conectarse y apareció un versículo del Antiguo testamento sobre el que se iba derramando un goteo de sangre. Ernesto, "el samaritano", conocía demasiado bien aquel mensaje.

‘No comeréis la sangre de ninguna criatura, pues el espíritu vital de toda carne es su sangre; cualquiera de los que la comieren será exterminado'".

Horas más tarde, a medianoche, un grito estremecedor irrumpe en la silenciosa oscuridad de la habitación y en las sombras estremecedoras que habitan en los rincones. El muchacho ha despertado acongojado y anegado en sudor, respira agitadamente como si le persiguieran todas las criaturas del Averno. Se siente casi atrapado en el doloroso momento de la angustia.

-" ¡¡¡Dios que está pasando!!!"- En sueños lo ha visto todo claro, la evidencia más terrible se ha hecho
realidad y ahora, completamente, atemorizado, piensa qué clase de pesadilla le está tocando vivir, en que loco delirio se ha metido con su alocado proceder. Comprende demasiado tarde que ha cometido varios errores irreparables. Se siente observado y percibe un pequeño destello por el rabillo del ojo, ese punto muerto en la visión periférica del ojo, fuera del alcance de la vista. Mueve ligeramente la cabeza y no hay nada. Siente la soledad y el pánico como una losa pesada que le ahoga y le impide respirar. Aterrorizado siente la desagradable sensación de que le están juzgando y espera la sentencia. Intuye una presencia enemiga agazapada en un oscuro rincón que amenaza con atacarle de un momento a otro. Pero hoy ha sido víctima de sus creencias, participar en ese juego ha despertado la furia de un Dios que premia y castiga por igual, y su mensaje conminatorio no ha podido ser más claro:

<< si bebes sangre, serás exterminado>> Y, la presencia de esa sangre que no te pertenece, sangre ajena que te condena al ostracismo que significa la violación de una creencia.

El rayo de luz de la farola de la calle ilumina la silueta de una figura conocida, aunque el fenómeno óptico de la luz reflejada parece duplicar el tamaño del ser, de apariencia frágil, que agazapado en las sombras espera paciente su hora...

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