Publiqué hace unos días este artículo sobre los contrastes de Barcelona en la Navidad y manifesté, quizá un poco precipitadamente un comentario personal sobre el Belén de la Plaza de Sant Jaume y, creo, que no fue demasiado acertado, ya que he podido contemplarlo de noche y, debo retractarme de todo lo dicho, porque con la iluminación nocturna, cambia radicalmente y se convierte en algo muy bello.
Y es que la noche con sus cálidas luces y sombras revive misterios y secretos ocultos. El aire fresco de la noche roza y vibra en las delicadas superficies cromadas de los orbes iluminados del árbol de navidad, atrapando con su brillo los ojos de la infancia.
Y, es que esa noche fascina con el fulgor de las silenciosas luces mágicas que se reflejan en los cristales creando efectos fantasmagóricos.
La recientemente fallecida, Phyllis Diller, dijo sobre la Navidad que era la época en la que todos quieren que se olvide su pasado y se recuerde su presente.
Y, paseando esta mañana de Navidad por el centro de Barcelona, hemos podido comprobar lo acertada de la frase, ya que ni la decoración, ni la ornamentación de las calles, durante estas fechas, ha conseguido ocultar las miserias que estamos viviendo.
Descubrir la mendicidad en la puerta de una iglesia sólo pone en evidencia las prioridades de nuestros gobernantes y la dolorosa indiferencia con que afrontan estas lacras sociales que atentan directamente contra los derechos humanos.
Se prefiere despilfarrar dinero público en instalar una pista de hielo que aportar ayudas a los necesitados.
La hipocresía de los ególatras, que representan la clase dominante de nuestro país, defensores a ultranza de lo que llaman caridad cristiana, cuando lo único que fomentan con sus acciones son, la avaricia, la injusticia, la pobreza y la desigualdad, constituyendo una característica de nuestra sociedad católica.
Desde mi punto de vista, por mucho que nos quieran decir lo contrario, en nuestra sociedad fundamentalmente laica, la Navidad ya se ha convertido en una tradición cultural, meramente consumista, no una festividad religiosa.
El pesebrismo merece un punto de inflexión, ya que es una de las tradiciones navideñas más arraigadas y en estas fechas se celebran los 150 años de pesebrismo asociativo y los cien años de la técnica del diorama. Por eso, Barcelona prepara un montón de exposiciones y homenajes, repartidos por toda la ciudad. Así que la tradicional habilidad creativa en la ejecución de los belenes de diseño, ha sido muy cuidada, aunque mi opinión personal sobre el que tengo ante mis ojos me la reservo.
Igualmente, iluminados por la noche resaltan de manera espectacular, a plena luz del día no destacan gran cosa. No obstante, existe una preciosa exposición de belenes en la cripta de la Iglesia de Belén, que no decepciona.
Triste Navidad si los políticos que nos gobiernan con su nacional catolicismo, siguen aplicando y justificando sus recortes de derechos y libertades, alegando solidaridad con los más pobres y la crisis, cuando ellos viven en la opulencia, gozando de inmunidad y todo tipo de privilegios.
Los mensajes de paz son incompatibles con los recortes a las personas más vulnerables y frágiles.
Vosotros, que os creéis representantes de los valores cristianos, como dijo el poeta, tan devotos de Frascuelo y de María, tan asiduos a misas del Gallo y adictos a comuniones diarias,
sois los destructores del Estado del Bienestar que estábamos construyendo entre todos, con gran esfuerzo, ese que garantiza la protección y solidaridad de los más desfavorecidos.
Vosotros, que alardeáis todo el día con el amor al prójimo, las raíces cristianas y todas esas mamandurrías huecas, empleando vuestras mismas palabras, digo que os habéis convertido en el principal azote de discapacitados, pobres, desahuciados y enfermos.
Vosotros que tanto creéis en castigos divinos, os aseguro que tarde o temprano, os llegará vuestro escarmiento y, ese día, pagaréis vuestros desmanes.
Y, ya concluyo con una dura frase de Navidad :
Y, ahora, os pongo una serie de fotos con extraños símbolos que se encuentran en la catedral. Dedicado a los amantes del esoterismo...
Una extraña frase esculpida en piedra, en una iglesia.
Símbolo grabado en una tumba.
Y es que la noche con sus cálidas luces y sombras revive misterios y secretos ocultos. El aire fresco de la noche roza y vibra en las delicadas superficies cromadas de los orbes iluminados del árbol de navidad, atrapando con su brillo los ojos de la infancia.
Y, es que esa noche fascina con el fulgor de las silenciosas luces mágicas que se reflejan en los cristales creando efectos fantasmagóricos.
La recientemente fallecida, Phyllis Diller, dijo sobre la Navidad que era la época en la que todos quieren que se olvide su pasado y se recuerde su presente.
Y, paseando esta mañana de Navidad por el centro de Barcelona, hemos podido comprobar lo acertada de la frase, ya que ni la decoración, ni la ornamentación de las calles, durante estas fechas, ha conseguido ocultar las miserias que estamos viviendo.
Descubrir la mendicidad en la puerta de una iglesia sólo pone en evidencia las prioridades de nuestros gobernantes y la dolorosa indiferencia con que afrontan estas lacras sociales que atentan directamente contra los derechos humanos.
Se prefiere despilfarrar dinero público en instalar una pista de hielo que aportar ayudas a los necesitados.
La hipocresía de los ególatras, que representan la clase dominante de nuestro país, defensores a ultranza de lo que llaman caridad cristiana, cuando lo único que fomentan con sus acciones son, la avaricia, la injusticia, la pobreza y la desigualdad, constituyendo una característica de nuestra sociedad católica.
Desde mi punto de vista, por mucho que nos quieran decir lo contrario, en nuestra sociedad fundamentalmente laica, la Navidad ya se ha convertido en una tradición cultural, meramente consumista, no una festividad religiosa.
El pesebrismo merece un punto de inflexión, ya que es una de las tradiciones navideñas más arraigadas y en estas fechas se celebran los 150 años de pesebrismo asociativo y los cien años de la técnica del diorama. Por eso, Barcelona prepara un montón de exposiciones y homenajes, repartidos por toda la ciudad. Así que la tradicional habilidad creativa en la ejecución de los belenes de diseño, ha sido muy cuidada, aunque mi opinión personal sobre el que tengo ante mis ojos me la reservo.
Igualmente, iluminados por la noche resaltan de manera espectacular, a plena luz del día no destacan gran cosa. No obstante, existe una preciosa exposición de belenes en la cripta de la Iglesia de Belén, que no decepciona.
Triste Navidad si los políticos que nos gobiernan con su nacional catolicismo, siguen aplicando y justificando sus recortes de derechos y libertades, alegando solidaridad con los más pobres y la crisis, cuando ellos viven en la opulencia, gozando de inmunidad y todo tipo de privilegios.
Los mensajes de paz son incompatibles con los recortes a las personas más vulnerables y frágiles.
Vosotros, que os creéis representantes de los valores cristianos, como dijo el poeta, tan devotos de Frascuelo y de María, tan asiduos a misas del Gallo y adictos a comuniones diarias,
sois los destructores del Estado del Bienestar que estábamos construyendo entre todos, con gran esfuerzo, ese que garantiza la protección y solidaridad de los más desfavorecidos.
Vosotros, que alardeáis todo el día con el amor al prójimo, las raíces cristianas y todas esas mamandurrías huecas, empleando vuestras mismas palabras, digo que os habéis convertido en el principal azote de discapacitados, pobres, desahuciados y enfermos.
Vosotros que tanto creéis en castigos divinos, os aseguro que tarde o temprano, os llegará vuestro escarmiento y, ese día, pagaréis vuestros desmanes.
Y, ya concluyo con una dura frase de Navidad :
Y, ahora, os pongo una serie de fotos con extraños símbolos que se encuentran en la catedral. Dedicado a los amantes del esoterismo...
Una extraña frase esculpida en piedra, en una iglesia.
Símbolo grabado en una tumba.
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